Es para mí un honor y una emoción muy especial estar en este recinto hermoso e histórico, pero además para celebrar la obra de uno de los artistas plásticos más importantes en la historia de nuestro país. Pero quiero pedirles que me permitan una licencia el día de hoy, porque voy a hablarle a Elena, a esta chica hermosa que acaba de hacer uso de la palabra con una enorme emoción para referirse a su padre, con ese orgullo, con ese amor, no sólo por lo que él significa como artista, que ya sería suficiente, sino por esos principios, esos valores y esas herramientas que le han dado para luchar por lo que cree y salir adelante.
Quiero decirte, Elena, que tu papá es muy importante para mucha gente. Aquí ya nos dijiste que están muchas personas que son cercanas a él, que son familia o que son amigos, o que lo han tratado, pero quiero que sepas que tu papá es muy importante para mucha gente que no lo conocemos personalmente, que sólo conocemos su obra, pero para algunos es muy importante no sólo por la belleza estética de su obra, sino por lo que su obra significa en nuestras vidas. Porque, así como tu papá con su ejemplo, con tus consejos, sus consejos, te ha permitido vislumbrar un mundo por el que vale la pena luchar para cambiarlo, tu papá hace eso con muchas y muchos de nosotros con su obra.