El día de hoy —tras casi año y medio de deliberaciones remotas— este Tribunal Pleno reanuda sus sesiones presenciales en este recinto.
Esto no significa, desde luego, un regreso total a la normalidad. Deberemos seguir aplicando con responsabilidad los protocolos sanitarios que a lo largo de este período hemos implementado para proteger la vida y la salud tanto de los servidores públicos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, como del público usuario. En este sentido, se mantendrá un aforo reducido de personas en todos nuestros edificios y seguiremos privilegiando el trabajo a distancia.
En general, la prevalencia de las herramientas digitales deberá convertirse en la nueva norma, de manera que el uso de documentos y firmas digitales, tanto en el ámbito jurisdiccional como administrativo, sustituya el uso de documentos impresos. Muchos de los cambios que fueron necesarios durante la pandemia son positivos y deberán permanecer.
En este día, expreso un recuerdo cariñoso y mis condolencias a las familias de las y los servidores públicos fallecidos por covid-19, así como a todas las personas que han perdido a un ser querido. El sufrimiento humano causado por la pandemia ha sido profundo, pero con solidaridad y esfuerzo conjunto saldremos adelante de esta crisis que aún no concluye…