Presentación del libro | 10 años de derechos. Una autobiografía jurisprudencial
En una presentación de un libro lo primero que surge y que uno debe hacer es agradecer. Ninguna obra, ningún libro y prácticamente nada en la vida se hace solo. Todo lo que uno lo puede lograr lo logra en compañía y máxime tratándose de una obra con estas características.
Y en primer lugar quiero agradecer a Mariana, mi esposa, mi amiga, mi compañera, mi pareja, todo su apoyo, todo su amor, no solo por haber estado a mi lado todo este tiempo y haber sido parte de estos esfuerzos, sino porque en alguno de estos asuntos, en lo personal y como familia, soportamos presiones, amenazas, intimidaciones y ella siempre estuvo ahí sin doblarse, sin quebrarse, siendo solidaria con las locuras que se me ocurría plantear.
También agradezco, obviamente, a mi hija Mariana, que, aunque físicamente en este momento no está con nosotros, siempre está con nosotros.
Agradezco también, muy particularmente, a todas y todos los que integran y han integrado mi ponencia, las secretarias y secretarios de estudio y cuenta, pero también de manera muy especial a los que llamamos “chiquis”, las y los jóvenes de mi ponencia que todos los días me han llenado, me siguen llenado de energía y entusiasmo para seguir adelante.